¿Te visualizas reportando e identificando la cantidad y tipo de residuo que se encuentra en el espacio público para que se puedan generar actividades de limpieza con participación ciudadana a través de un aplicativo móvil (App)? Este concepto, que puede ser futurista, ya es una realidad en ciudades en donde la tecnología digital ha ingresado a revolucionar la manera de ver y manejar los residuos sólidos. No obstante, cabe recalcar que esta innovación no ha llegado a muchos lugares, por lo que el Grupo BID y sus socios externos han creado Fuente de Innovación, una alianza que permite fomentar la generación y adopción de la innovación digital y social en el sector de residuos sólidos en la región, y promover el acceso a servicios básicos de manera eficiente, segura y oportuna.
En los últimos años, el rol de la industria 4.0 o de la tecnología inteligente ha impactado de manera positiva en los sistemas de gestión de residuos sólidos a nivel mundial, a través del desarrollo de herramientas que solventan los principales problemas de gestión de residuos, particularmente en los procesos de limpieza, barrido, recolección, transporte, valorización y disposición final. A las tecnologías digitales con mayor atención en el sector de residuos sólidos se las conoce como tecnologías inteligentes de residuos –Smart Waste Technologies (SWT)–, que contienen elementos como: i) robótica, ii) inteligencia artificial, iii) internet de las cosas, iv) computación en la nube, v) análisis de datos y vi) tecnología en comunicación.
En países en vías de desarrollo, donde el acceso a servicios básicos constituye uno de los principales retos para lograr el bienestar de la población, la aplicación de tecnología se convierte en una oportunidad para acortar brechas en la dotación de servicios básicos seguros, equitativos y de calidad. Uno de los principales desafíos para el adecuado manejo de residuos sólidos en América Latina y el Caribe (ALC) es la generación de información eficiente, confiable y oportuna en toda su cadena por parte de las entidades prestadoras y reguladoras de sistemas de gestión de residuos. La carencia de esta información impacta de forma negativa en los procesos de seguimiento, monitoreo y control del sistema, así como también en el diseño e implementación de políticas públicas que sean aplicables y sostenibles en el contexto local.
En el siguiente gráfico, se muestran los potenciales usos de las tecnologías digitales en los diferentes eslabones de la cadena de gestión integral de residuos sólidos, en donde también se han incluido ejemplos de cómo contribuyen a la generación de data y eficiencia de los sistemas.
Gráfico 1. Descripción de uso de tecnologías digitales en cadena de Gestión Integral de Residuos Sólidos. Elaboración propia
Dentro de la cadena, el eslabón que más ha experimentado con tecnologías digitales y, por ende, en donde mayor innovación ha existido es el sistema de logística de recolección, que ha impactado de forma positiva en la organización de tareas por parte de prestadores de servicio, organización de personal y maquinaria, así como también en la generación de data (como, por ejemplo, tipo de residuos y toneladas recolectadas, seguimiento y monitoreo de operaciones, reporte de incidentes en línea, estado de vida útil del vehículo, entre otros). Así mismo, la introducción y operación de contenedores inteligentes se torna cada vez más importante para garantizar una eficiencia en operaciones y optimización de recursos. La presencia de tecnologías de IoT –tales como sensores de volumen o chips RFDI para identificar ubicación exacta en contenedores– permite que la información pueda ser analizada de manera eficiente y segura, y que el prestador de servicios pueda tomar decisiones oportunas. En la región ya se encuentran presentes algunas empresas que brindan este tipo de servicios (sistema de contenedores inteligentes), como en Santiago de Chile, por ejemplo, en donde se ha reducido el promedio de recolección en temporada pico de 20 veces a 3,4 veces por semana en el proyecto piloto.
Así mismo, el uso de tecnologías de comunicación (como, por ejemplo, los aplicativos móviles (Apps) para clientes de servicios de recolección) ha permitido no solo generar canales de comunicación entre entidades prestadoras de servicio y generadores de residuos, sino también crear data para la generación de facturas personalizadas; estas, en muchos casos, cuentan con dispositivos tipo códigos QR o etiquetas NFC, que permiten conocer el tipo y cantidad de residuos generados y la ubicación específica de estos para su posterior programación y ejecución del servicio de recolección. Algunas Apps han sido desarrolladas para la identificación de residuos dispuestos inadecuadamente en espacios públicos, como es el caso de Pirika, una aplicación que, a través de una foto con coordenadas GPS, análisis de datos e inteligencia artificial, permite identificar qué tipo de residuo se encuentra ubicado en una determinada área geográfica, y activa la intervención del prestador de servicio o de tareas de limpieza con participación de la sociedad civil.
El futuro del manejo de residuos sólidos es digital, y, por ende, debemos conocer las tecnologías digitales existentes y su aplicación en las condiciones propias de cada área geográfica. Los actores de la cadena de residuos sólidos –en especial los prestadores de servicios y gobiernos nacionales y locales– pueden encontrar importantes ventajas al explorar el campo de la innovación digital, proceso que debe ir acompañado de una comprensión y análisis de las capacidades técnicas, económicas y culturales instaladas en cada territorio, para asegurar su eficiencia y sostenibilidad. La tecnología puede ser un factor clave para acortar las brechas para el acceso universal a servicios básicos con la finalidad última de alcanzar en menor tiempo y con mayor eficiencia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Las tecnologías 4.0 están revolucionando todos los sectores. El Grupo BID, a través de Fuente de Innovación, busca identificar entidades prestadoras de servicios que estén interesadas en innovar en Smart Waste Technologies (SWT), y en startups que estén trabajando en tecnologías digitales para el manejo de residuos sólidos en la región. De esta forma poder generar una red de contactos para futuros llamados que solventen desafíos en el sector.
*Por: Paula Guerra Consultora en residuos sólidos y reciclaje inclusivo para el BID.