Por: Dr. Virgilio M. Malagón Álvarez, PhD
virgiliomalagonalvarez@gmail.com
Para «El Mundo de los Negocios» y demás Multimedios de The Ballester Business & Media Group, Inc.
Amigo Lector:
En nuestro planeta hay más de 200 millones de migrantes, internacionales y remesantes, en el mundo. Estas son personas que viven en un país diferente a su país de nacimiento.
Si hubiese un país formado únicamente por migrantes internacionales, sería más grande, en población, que Brasil; más grande, en el tamaño de su economía, que Francia.
NOTA: Unos 180 millones de ellos, de países pobres, envían dinero a casa con regularidad.
I-Trasfondo histórico:
1-US$425 mil millones de dólares fue el monto de las remesas enviadas el año pasado por los migrantes a los países en desarrollo. Esa es una cifra notable porque es tres veces el tamaño del total del dinero de la ayuda al desarrollo, que se originan en los organismos regionales y bilaterales.
2-Los remesantes, de manera individual, envían unos US$600 dólares al mes, en promedio. Sin embargo, si calculamos que son repetidas mes tras mes, por millones de personas, estas sumas de dinero suman ríos de divisas hacia loa países receptores. En muchos casos llegan a ser hasta el 30% del Producto Interno Bruto de éstos.
3-India, el año pasado, recibió 72 mil millones de dólares, más que sus exportaciones. En Egipto, las remesas triplican los ingresos del Canal de Suez. En Tayikistán, las remesas representan el 42 por ciento del PIB. Y en los países más pobres, los países más pequeños, los países frágiles, los países afectados por conflictos, las remesas son un salvavidas, como en Somalia o en Haití.
4-Estos flujos tienen enormes impactos en las economías y en las personas pobres. Ahora bien, las remesas, a diferencia del dinero de inversión privada, no regresan a la primera señal de problemas en el país receptor. En realidad actúan como un seguro cuando la familia está en problemas. Actúan como un seguro, ya que los migrantes envían más dinero entonces.
5-A diferencia del dinero de la ayuda para el desarrollo, que debe pasar por agencias oficiales, a través de los gobiernos, las remesas llegan directamente a los pobres, llegan a la familia y, a menudo, con asesoramiento comercial.
6-Los inmigrantes envían dinero a casa para comprar alimentos, comprar artículos de primera necesidad, construir casas, financiar la educación, financiar la atención médica para los ancianos, inversiones comerciales para amigos y familiares, etc. Los inmigrantes envían aún más dinero a casa para ocasiones especiales como una cirugía o una boda; los migrantes también envían dinero, quizás demasiadas veces, para funerales inesperados a los que no pueden asistir.
NOTA: Por mucho que estos flujos hagan tanto bien, existen barreras para estos flujos de remesas, estos US$425 mil millones de dólares en remesas. El más importante de ellos es el costo exorbitante de enviar dinero a casa.
7- Las empresas de transferencia de dinero estructuran sus tarifas para ordeñar a los pobres. Ejemplo:
«Hasta 500 dólares si quieres enviar, te cobramos 30 dólares fijos». Si eres pobre y solo tienes 200 dólares para enviar, tienes que pagar esa tarifa de $30 (15%).
NOTA: El costo promedio global de enviar dinero es del ocho por ciento. Eso significa que envías 100 dólares, la familia del otro lado recibe solo 92 dólares.
a)-Para enviar dinero a África, el costo es aún mayor: 12 por ciento.
b)-Para enviar dinero dentro de África, el costo es aún mayor: más del 20 por ciento. Por ejemplo, enviar dinero desde Benín a Nigeria.
c)-En el caso de Venezuela, donde por el control de cambios envías 100 dólares y tienes suerte si la familia del otro lado recibe hasta 10 dólares. Por supuesto, nadie envía dinero a Venezuela por el canal oficial. Todo va en maletas.
NOTA: Siempre que los costos son altos, el dinero pasa a la clandestinidad.
8-Otro punto lo constituye el hecho de que muchos países en desarrollo en realidad tienen una prohibición general de enviar dinero fuera del país. Muchas naciones ricas también tienen una prohibición general de enviar dinero a países específicos. Entonces, ¿es que no hay mejores opciones, más baratas, para enviar dinero? Veamos:
a)-En Kenia se permite a las personas enviar y recibir dinero a un costo fijo de solo 60 centavos de dólar, por transacción.
b)- La Reserva Federal de EE. UU. inició un programa con México para permitir que las empresas de servicios monetarios envíen dinero a México por un costo fijo de solo 67 centavos de dólar, por transacción.
c)-Empero, estas opciones mejores, más baratas y rápidas no se pueden aplicar a nivel internacional debido al temor al lavado de dinero, aunque hay pocos datos para respaldar cualquier conexión significativa entre el lavado de dinero y estas pequeñas transacciones de remesas.
d)- Muchos bancos internacionales ahora desconfían de alojar cuentas bancarias de empresas de servicios monetarios, especialmente aquellas que atienden a países donde el narcotráfico y la narcoguerrilla está muy entronizada en el ámbito social.
e)-La mayoría de los gobiernos del mundo han permitido que sus oficinas de correos tengan asociaciones exclusivas con empresas de transferencia de dinero, cuyo costo es usualmente alto.
II-Hacia un esquema funcional:
Entonces: ¿Qué pueden hacer las organizaciones internacionales, los gobiernos y las remesadoras para reducir el costo de enviar dinero a los hogares?
1-Adecuar las regulaciones sobre las pequeñas remesas de menos de US1.000 dólares. Los gobiernos deben reconocer que las pequeñas remesas no son lavado de dinero.
2-Los gobiernos deberían abolir las asociaciones exclusivas entre su oficina de correos y cualquier empresa de transferencia de dinero. O sea, entre la oficina de correos y cualquier sistema bancario nacional que tenga una gran red de remesas. De hecho, deberían promover la competencia, a través de la apertura y la asociación tipo parnership, para que reduzcamos los costos. A más oferta, mayor serán las opciones de uso.
3-Las grandes organizaciones filantrópicas, sin fines de lucro, deberían crear una plataforma de remesas, a un costo mínimo, para servir a las empresas de transferencia de dinero para que puedan enviar dinero a bajo costo, mientras cumplen con todas las regulaciones complejas en todo el mundo. Los Correos oficiales podrían coordinar estos esfuerzos.
NOTA: Esta organizaciones deben de establecer la meta de reducir los costos de las remesas al uno por ciento (1%), del actual ocho por ciento (8%). Si reducimos los costos al uno por ciento, eso generaría un ahorro de US$30 mil millones de dólares por año.
4-Treinta mil millones de dólares, eso es más que todo el presupuesto de ayuda bilateral que se destina a África por año. Eso es más grande que, o casi similar, al presupuesto total de ayuda del gobierno de los Estados Unidos, el mayor donante del planeta. En realidad, los ahorros serían mayores que los 30 mil millones porque los canales de remesas también se utilizan con fines de ayuda, comercio e inversión; verbigracia: una integración vertical, con una amplia base de configuración y operabilidad.
5-Una de las cosas más emocionantes y nuevas que suceden en el área de las remesas es cómo movilizar, a través de la innovación, el ahorro de la diáspora y las donaciones de la diáspora.
a)-Los migrantes envían dinero a casa, pero también ahorran una gran cantidad de dinero donde viven. Anualmente, los ahorros de los migrantes se estiman en US$500 mil millones de dólares.
b)-La mayor parte de ese dinero está estacionado en depósitos bancarios que le dan una tasa de interés muy pírricas.
6-Si el Banco de Reservas-BANRESERVAS- ofreciera una tasa de interés muy atractiva, y luego dijera que el dinero se usaría para construir escuelas, consultorios médicos, caminos vecinales, etc, en el país receptor, muchos migrantes estarían interesados en remesar mucho dinero porque no son solo las ganancias financieras las que les dan la oportunidad de seguir comprometidos con el desarrollo de su país.
FINALMENTE, las remesas empoderan a las personas. Debemos hacer todo lo posible para que las remesas y la contratación sean más seguras y económicas.