Con la creciente madurez digital y operativa, un pequeño grupo de empresas -alrededor del 7% a nivel mundial- han logrado casi el doble de eficiencia y tres veces la rentabilidad de sus competidores. Así lo revelan los datos del último estudio de Accenture ‘Operaciones inteligentes para los negocios del futuro’, donde se refiere a estas empresas como las “preparadas para el futuro”.
Estas empresas “preparadas para el futuro”, según el informe, transforman la forma en la que trabajan mediante el uso de datos en la toma de decisiones, la combinación de personas con la inteligencia artificial y el empleo de modelos de trabajo ágiles.
Es más, el estudio indica que la aceleración de la adopción digital en las empresas, impulsada por la pandemia y las nuevas formas ágiles de operar, podrían desbloquear un crecimiento rentable de 4,4 billones de euros a nivel global.
Asimismo, destaca que cuanto mayor es la madurez, mayor es el grado de capacidades digitales utilizadas, como inteligencia artificial (IA), cloud y data analytics. Otro dato revelador del informe apunta que si todas las organizaciones estuvieran en fase ‘Future-Ready’, equivaldría a una rentabilidad global añadida de 5.400 millones de dólares.
Muchos líderes están introduciendo cambios incrementales en sus operaciones de negocio (sus sistemas básicos, procesos o capacidades de gestión de servicios). Sin embargo, con frecuencia, no consiguen cambiar la forma de hacer las cosas. Además, no actúan ni se transforman con la rapidez necesaria, destacan desde la entidad. En este sentido, el estudio afirma que aplicar inteligencia operativa basada en tecnología a la organización implica un mayor beneficio.
Niveles de madurez operativa
En este estudio, Accenture identifica cuatro niveles de madurez operativa: estable, eficiente, predictivo y ‘Future-Ready’. Cada uno de ellos se caracteriza por tecnologías que mejoran la eficiencia, la información y las capacidades. Así, el informe señala que:
- El ascenso de un solo nivel (de predictivo a Future-Ready) supone un aumento de rentabilidad de 5,8 puntos porcentuales y una mejora de la eficiencia del 18,8 %.
- Las organizaciones que ascendieron un nivel en la escala de madurez en 2019 fueron, en promedio, un 7,6 % más eficientes (menos gastos de explotación por cada dólar que ingresaron) y 2,3 puntos porcentuales más rentables (EBITDA como porcentaje de ingresos).
- Ser ‘Future-Ready’ supone mayores ventajas. Las organizaciones en los niveles estable y eficiente que ascendieron a Future-Ready en 2020 aumentaron 2,1 veces su eficiencia operativa y 4,1 veces su rentabilidad con respecto a otras organizaciones cuya madurez mejoró de manera más modesta.
Las empresas de seguros y alta tecnología, las más maduras
El estudio revela que las organizaciones presentan diferentes niveles de madurez operativa en todas las industrias pero, por lo general, las empresas de seguros y alta tecnología son las más maduras. Y destaca un dato: sorprendentemente, solo el 7% de los encuestados está en la categoría ‘Future-Ready’.
En referencia a la industria aseguradora, se concreta que: un 31% de las compañías de seguros tiene un nivel de madurez operativa eficiente; un 57%, predictivo; y un 10%, ‘Future-Ready’.
La mayor parte de las organizaciones han avanzado mucho hacia un nivel más alto de madurez en los 3 últimos años, pero a la mayoría (93%) aún les queda camino por recorrer. En los próximos 3 años, muchas organizaciones, aunque no todas, pretenden mejorar de forma drástica sus capacidades y alcanzar un nivel más alto de madurez, especialmente automoción, seguros y banca.
Claves para ser ‘Future-Ready’
El estudio ha detectado que los crecientes niveles de madurez digital y operativa de las organizaciones están acelerando la progresión de las compañías hacia el nivel “preparados para el futuro”. Las áreas clave son:
- Automatizar a escala: en 2023, prácticamente se quintuplicará el número de ejecutivos que esperan que sus modelos operativos utilicen exclusivamente procesos digitalizados. Sin embargo, dos de cada tres encuestados no creen que puedan alcanzar esa capacidad en el mismo tiempo.
- Tomar decisiones basadas en datos: si utilizan datos diversos (con y sin estructura, internos y externos, aislados y procedentes de la cadena de valor) y aumentan la calidad de esos datos, los ejecutivos podrán combinar lo mejor de la intuición y el análisis en un bucle de retroalimentación continua. Antes, las organizaciones tardaban al menos 3 años en avanzar un solo nivel en la escala de madurez operativa. Ahora resulta mucho más fácil progresar gracias al uso de datos y analítica en cloud. Gracias a los servicios cloud, las organizaciones pueden pagar por hardware y software sobre la marcha, aumentando o reduciendo los niveles de uso según las necesidades.
- Optimizar el talento humano con tecnología: si crean un entorno de colaboración entre humanos y máquinas donde la tecnología ayude a las personas (y no al revés), las organizaciones pueden repartir el trabajo de manera más eficiente y los empleados podrán dedicarse a tareas más importantes y creativas: la mejor forma de identificar nuevas fuentes de valor.
Modelo operativo flexible
El estudio concluye que para ser ‘Future-Ready’ se necesita un modelo operativo flexible: una combinación optimizada de equipos multidisciplinares y tecnologías on demand que funcionen en un amplio ecosistema de colaboraciones para ofrecer resultados excepcionales.
Además, recuerda que las colaboraciones en el ecosistema aportan conocimientos complementarios y datos más diversos; fomentan la evolución continua, en lugar de mejoras puntuales en proyectos concretos; dan acceso a tecnologías avanzadas como IA y blockchain; e impulsan la innovación. Finalmente, apunta: «Los modelos de colaboración, basados en una visión compartida y condiciones comerciales mutuamente beneficiosas, contribuyen a generar valor de transformación y experiencias».