Huawei celebra este septiembre sus 25 años de presencia en Brasil, donde desempeña un papel crucial en la infraestructura de telecomunicaciones. La empresa, que comenzó con un capital de poco más de 5 mil dólares, llegó al país en 1997 y ahora es una multinacional multimillonaria, con presencia en 170 países y un papel fundamental en la conectividad de miles de millones de personas en todo el mundo.
En Brasil, sus dispositivos, como teléfonos celulares y computadoras, nunca se comercializaron. En cambio, la presencia de Huawei en la infraestructura de telecomunicaciones puede llegar al 70 por ciento, según datos de IDC. La empresa sólo se limita a decir que sus equipos cubren al 95 por ciento de la población brasileña.
La aceptación de Huawei en Brasil se ve reforzada por el hecho de que China es el principal socio comercial del país. Cualquier prohibición de Huawei podría resultar en sanciones de Pekín, como sucedió en el caso de Suecia, que prohibió a la empresa en su red 5G, lo que llevó a un boicot posterior a Ericsson y a una disminución de sus operaciones en China.
En el evento de celebración de los 25 años de Huawei en Brasilia, el CEO de Huawei Brasil, Derrick Sun Baocheng, habló sobre la visión de futuro de la empresa, actuando en un ecosistema para apoyar a Brasil en su consolidación como una nación digital.
“La visión de nuestra empresa es llevar un mundo completamente conectado a cada persona, cada hogar y cada organización, avanzando hacia el mundo inteligente de 2030. La tecnología es la base de la economía 4.0, desde la agricultura hasta la industria”, expresó en su discurso.
En respuesta, el vicepresidente de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) y consejero, Moisés Moreira, recordó que el mensaje de Huawei es que cree en Brasil y destacó que “Brasil también cree en Huawei”, marcando la posición del gobierno brasileño en contra de la tendencia mundial.
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Las batallas de Huawei
La empresa aún enfrenta desconfianza en varias partes del mundo debido a preocupaciones sobre su cercanía con el gobierno chino. Incluso después de Donald Trump, Estados Unidos sigue presionando a países como Portugal para que prohíban la presencia de Huawei en la implementación del 5G.
La Ley de Inteligencia Nacional de China, de 2017, exige que las empresas nacionales colaboren con el trabajo de inteligencia nacional, lo que genera preocupaciones sobre la posibilidad de que Huawei, inevitablemente, trabaje en favor del Partido Comunista Chino (PCC), una afirmación que la empresa niega.
La empresa también ha tenido un impacto en sus negocios, como la imposibilidad de utilizar el sistema operativo Android en sus teléfonos celulares, lo que llevó a la adopción de HarmonyOS. Aunque Huawei es un líder global en tecnología 5G, las acusaciones de espionaje han afectado parcialmente sus esfuerzos en el sector. En Brasil, el gobierno dudó en permitir su participación en la implementación de las redes 5G, pero finalmente otorgó la autorización.
Actualmente, la empresa recauda 500 millones de dólares en ingresos por licencias de patentes, principalmente en los sectores de información y telecomunicaciones. Huawei posee 15.4 por ciento del total mundial de patentes otorgadas para la tecnología 5G, con alrededor de 200 acuerdos bilaterales y otros 350 a través de grupos de patentes, la mayoría de ellos en América Latina.