Cleveland (OH) – La publicidad digital no solo afecta la privacidad de los niños a través de la recopilación de datos, sino que también perjudica su salud, advirtió este lunes la Asociación Americana de Pediatría (AAP)
La AAP emitió una declaración de política pública en la que señala cómo las investigaciones han demostrado que los niños son especialmente vulnerables a la publicidad. Los menores que están expuestos a anuncios de alcohol, tabaco, marihuana, y alimentos y bebidas no saludables tienen más probabilidades de consumir estos productos.
“Los legisladores, los productores de medios y las compañías tecnológicas tienen el deber de comenzar a desarrollar un entorno digital en que las familias puedan navegar a juegos, espectáculos y otros contenidos educativos y entretenidos que brinden oportunidades para los niños, en lugar de centrarse en las ganancias y la recopilación de datos”, dijo Nusheen Ameenuddin, coautora de la declaración y presidenta del Consejo de Comunicaciones y Medios de la AAP.
Según Ameenuddin, la publicidad es omnipresente en los medios y entornos digitales de los niños. Un análisis de las aplicaciones gratuitas más descargadas para niños menores de 5 años encontró que 96 % tenían contenido comercial, incluidos anuncios ocultos y anuncios que brindan incentivos como ventajas de juego.
Además, los personajes de la aplicación a veces fomentan las compras dentro de la misma en juegos destinados a niños. Según la AAP, los niños son particularmente vulnerables a esta táctica de mercadotecnia.
Por otro lado, la Ley de Protección de la Privacidad en Línea de los Niños (COPPA), promulgada en 1998, ofrece cierta protección a los niños en línea, pero según Ameenuddin, esta ley tiene muchas lagunas y no se aplica de manera confiable.
Los diseñadores de aplicaciones y juegos pueden eludir fácilmente las pautas de COPPA al afirmar que un juego o aplicación es para “audiencias generales”, incluso cuando está claramente dirigido a niños, y COPPA solo protege a niños menores de 13 años. Es por esto que la AAP recomienda que las protecciones de COPPA se amplíen a los 17 años.
“Internet no debería ser un lugar donde la publicidad de productos poco saludables pueda llegar a los niños”, expresó Ameenuddin. “También existe la preocupación de que las comunidades más pobres y marginadas estén expuestas a más información errónea sobre la salud, lo que podría afectar negativamente la salud de estos niños que ya enfrentan muchos desafíos,” añadió.
Para esta experta, los adolescentes también necesitan protección contra los anuncios en línea, que afectan su autoimagen. Los anuncios en línea comunican “ideales” de apariencia corporal en los anuncios de pérdida de peso, y pueden infundir prejuicios culturales o raciales en productos para aclarar la piel o para alisar el cabello.
La AAP recomienda que los padres hablen con los niños sobre los anuncios que ven desde una edad temprana, y que continúen las conversaciones durante su crecimiento y desarrollo.